
¿Para qué sirven los extintores de clase D?
Los extintores de clase D están diseñados para apagar incendios provocados por metales combustibles que no pueden ser apagados con agua u otros agentes extintores convencionales.
Algunos de los metales más comunes que pueden causar incendios de clase D incluyen:
- Magnesio
- Titanio
- Sodio
- Potasio
- Aluminio
- Litio
Estos metales tienen una alta capacidad de combustión y, al entrar en contacto con agua o ciertos productos químicos, pueden reaccionar violentamente y empeorar el incendio. Los extintores de clase D contienen polvo seco especial que sofoca el fuego, aislando el metal caliente del oxígeno y evitando que el fuego se propague.
Recomendaciones de clientes que deben adquirir extintores de clase D:
- Industrias metalúrgicas:
Las fundiciones de metales, fábricas de aleaciones o cualquier empresa que trabaje con metales como magnesio, titanio o aluminio debe tener extintores de clase D. Estos metales pueden causar incendios de alta intensidad cuando se someten a altas temperaturas, por lo que es esencial tener los extintores adecuados en estas áreas. - Plantas de producción de magnesio:
Las plantas de magnesio son propensas a incendios de clase D debido a la alta inflamabilidad del magnesio. El magnesio en polvo, en particular, es muy reactivo y puede encenderse fácilmente, por lo que los extintores de clase D son cruciales en este tipo de instalaciones. - Industria aeroespacial:
Las empresas que manejan titanio, aluminio y otros metales ligeros combustibles en la fabricación de aeronaves o piezas aeroespaciales deben contar con extintores de clase D. Estos metales son utilizados debido a su resistencia, pero también presentan un alto riesgo de incendio. - Laboratorios y talleres de investigación:
En los laboratorios que investigan materiales metálicos o en los talleres de mecánica que utilizan aleaciones o metales que pueden ser inflamables (como el litio o el sodio), los extintores de clase D son una medida preventiva vital para la seguridad de las instalaciones y los trabajadores. - Centros de reciclaje de metales:
Las instalaciones que procesan residuos de metales como aluminio, magnesio o titanio, o que reciclan productos electrónicos que contienen estos metales, necesitan extintores de clase D debido al riesgo de incendios inesperados causados por estos materiales. - Industria automotriz:
Las fábricas de automóviles que manejan o utilizan metales como aluminio o magnesio en sus procesos de fabricación también deben contar con extintores de clase D, especialmente en áreas donde estos metales puedan estar expuestos al calor o a condiciones que favorezcan su combustión. - Laboratorios de baterías:
Las empresas que fabrican baterías de litio, como las utilizadas en vehículos eléctricos o dispositivos electrónicos, deben estar preparadas para incendios de clase D, ya que el litio es extremadamente inflamable y requiere un tratamiento especial para su extinción.